Fuente: Mundo Marítimo
Por primera vez en 26 años, Brasil desplazó a Argentina del primer lugar en las exportaciones de harina de soja a nivel mundial, al marcar un crecimiento de casi un 7% en lo que va del año. De mantenerse las actuales condiciones de mercado, es esperable que el crecimiento en los embarques sea aún mayor a medida que avance la campaña de soja 2022/23, que superaría las 163 millones de toneladas de acuerdo con la consultora StoneX, sumando más de 30 millones de toneladas respecto a la campaña 2021/2022, reporta la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
Por otro lado, la histórica sequía en Argentina la lleva a un recorte cercano al 34% en los embarques de harina de soja en lo que va del año. No obstante, el volumen de importaciones le permitirá amortiguar parcialmente el fuerte recorte productivo. En este sentido, con la última estimación de la Guía Estratégica para el Agro (GEA – BCR), la producción de soja 2022/23 totalizará los 20 millones de toneladas, una merma superior al 52% respecto a la campaña anterior.
Aceite de soja
Con relación al aceite de soja, el volumen de exportaciones argentinas también se ubica por debajo del año pasado. Sin embargo, el recorte se acerca al 12%, un nivel menor que las bajas experimentadas por la harina de soja. Por su parte, Brasil duplica el acumulado de exportaciones que tenía hace apenas dos años. En ese entonces, las exportaciones argentinas de aceite superaban en más de un 400% a las brasileñas, mientras que actualmente Argentina se ubica solo un 57% por encima del Brasil.
En este complejo contexto productivo, el precio FOB de la harina de soja del Up River creció un 25% desde los mínimos de principios de junio. Por su parte, el aceite subió cerca de un 20% en este mismo período. Esto mejoró la ecuación de la industria, a la hora de analizar su margen teórico, aunque la virtual paralización de las operaciones imposibilita aprovechar este resultado.
Causas de la baja
Entre los motivos que explican la merma en la actividad se destaca que el complejo ha quedado fuera del nuevo Programa de Incremento Exportador (PIE IV), medida del Gobierno Nacional que busca incentivar las exportaciones de productos agroindustriales, especialmente de soja y sus derivados, mediante la aplicación de un tipo de cambio diferencial que mejora el ingreso de divisas al país.
Así, desde el fin del PIE III el pasado 2 de junio el 2 de agosto se comercializaron cerca de 2,5 millones de toneladas de soja en el mercado interno, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de Argentina, SAGyP y del Sistema de Información Obligatoria, SIO granos. Dicho volumen está lejos de las casi 4 millones de toneladas que se vendieron en el mismo período del año pasado.
De acuerdo con la BCR, julio cierra como el mes más bajo de toda la comercialización de soja desde enero de 2017. Las compras de soja en julio pasado cayeron un 74% respecto al mismo mes del año pasado. No conforme con ello, 6 de los últimos 7 meses de este año se muestran con en la comercialización más baja de soja para cada mes del año.
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